sábado, marzo 31, 2007

Aficciones.

Hoy déjame abrazarte y dame tiempo.

Tendremos tiempo para salir de compras, tiempo para conversar.

Podré violarte en una hora, quizás en treinta minutos me bañaré y saldré limpia de culpas de tu habitación, acomodando mis lentes de sol y poniendo brillo en mis labios otra vez.

El tiempo nos sobrará para juntarnos mañana, y quién sabe, podré violarte de nuevo con más amor.

Hoy déjame acariciarte hasta hacerte temblar, hasta reventar tus venas con tanta pasión.

Nada más dame el tiempo suficiente de reacomodar en ti viejas emociones. Podríamos hacer lo que hacíamos antes de este quiebre inminente entre los dos, quizás hablar por teléfono o ver televisión.

Se que te gustaría compartir un cigarro junto a mi, pero no sé si tendrás la paciencia de escuchar todo lo que tengo que decirte.

Hoy déjame besarte, tomarte de la mano, déjame hacerte el amor como la primera vez.

Llenemos los espacios vacíos juntos, tomemos jugo del mismo vaso.

Te compraré un helado de chocolate extra grande, y te ayudaré a terminarlo aunque así no lo quieras.

Déjame dormir a tu lado, sólo dormir. Déjame golpearte un par de veces y desatar la ira que llevo dentro y luego déjame pedirte perdón con un beso.

Hoy solo dame tiempo, y después veremos que más podemos hacer.